Nuestros especialistas en desahucio conseguirán la recuperación de su vivienda y por supuesto, la reclamación de las rentas impagadas.
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Los más notable del servicio de Atlántico Legal es que en un plazo de 24 a 48 horas presentamos la demanda de desahucio.
Transcurrido el plazo legal, la demanda de desahucio se presentará ante el Juzgado de Primera Instancia. Por supuesto, en el Juzgado de la localidad donde esté ubicada la vivienda.
En el supuesto que el inquilino no se oponga a nuestra demanda en 10 días, el Juzgado acordará el desahucio inmediatamente.
¿Tienes okupas en tu casa? ¿Te han ocupado alguna propiedad y estás buscando una solución?
Tranquilo, te vamos a explicar cómo recuperar tu inmueble con la Ley de Desahucio Exprés.
Gracias a la última modificación legal de desahucio podrás recuperar tu vivienda en un plazo de 30 días y por lo tanto, desalojar a los okupas.
El cambio principal consiste en disminuir el plazo de recuperación de tu vivienda.
En otras palabras, tendrás la posibilidad de presentar una demanda civil de desalojo de forma más barata, y aún más exprés.
Por tanto, conseguirás recuperar tu vivienda en sólo un mes.
En el caso que tu inquilino no quiera pagarte la renta, ahora puedes recuperar tu vivienda más rápidamente. Concretamente, con la nueva ley, podrás presentar la demanda con sólo 1 renta impagada. Es una información importante porque convierte el desahucio en un proceso exprés.
Además, en situaciones de este tipo de emergencia, donde te han despojado de tu bien más preciado; la casa o un local comercial.
Sin duda, existe el riesgo potencial, en consecuencia, la rapidez jurídica es fundamental.
Resumiendo, sea okupa o inquilino moroso, podrás recuperar tu propiedad gracias al desahucio exprés.
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FORMULARIO
de Contacto
Después de enviar el formulario online, nos pondremos en contacto contigo en un plazo de 24 horas. Si se trata de una urgencia, mejor llámanos.
Claramente el contrato de arrendamiento firmado por ambas partes. Sin olvidar, la cuantificación del importe de las rentas no abonadas por el inquilino.
Enviar a través de un burofax certificado, la reclamación al inquilino. Por un lado con acuse de recibo, por otro lado, exigiendo el pago en un plazo determinado. Puesto que, es un requisito previo obligatorio antes de acudir al Juzgado.
Presentamos la demanda en el Juzgado. A partir de un plazo de diez días el inquilino moroso podrá oponerse o pagar, de lo contrario se dictará la sentencia de desahucio.
En este supuesto, los pasos son exactamente los mismos que los descritos anteriormente, con las siguientes particularidades:
Antes de todo, deberás enviarnos el título de propiedad para acreditar la pertenencia del inmueble.
Inmediatamente el Juzgado enviará una notificación a los “okupas” ilegales. Los ocupantes se podrán oponer a esta notificación sólo si presentan un contrato o autorización para residir en esa vivienda.
Desde el momento en que los "okupas" no tengan autorización de la propiedad, el Juez dictará auto y deberán entregar la vivienda o el local en un plazo de 5 días. En el caso que los "okupas" no devuelvan la vivienda de forma voluntaria, el Juez ordenará el desalojo inmediato, valiéndose de la autoridad policial.
Es suficiente una única mensualidad sin abonar para interponer la demanda de desahucio.
Admitida por el juzgado la demanda, se requerirá al inquilino por diez días para que se oponga o pague. Puesto que los plazos se han acortado por las diferentes reformas legales, nuestra experiencia nos lleva a señalar que en realidad, el procedimiento suele durar entre dos y cuatro meses.
Sí, nosotros recomendamos enviar un burofax requiriendo el pago en un plazo de una semana.
Normalmente los costes son asequibles. Se toma como referencia la cuantía adeudada hasta la fecha, y la renta anual del alquiler.
En casos que el importe supere los 2000 € es obligatorio contar con Abogado y estar representado por un Procurador.
No, de hacerlo podría incurrir en un delito por coacciones. Nuestra recomendación es que los contratos de suministro estén siempre a nombre del inquilino para que en caso de impago las compañías les reclamen a ellos.
